jueves, 3 de agosto de 2017

La Revolución bolivariana de Venezuela “ Va a una fase de contraofensiva”: Tras elección de constituyente en Venezuela

Chavismo califica como “extraordinaria”, la participación de los votantes en la elección de miembros de la Asamblea Nacional Constituyente. En respuesta a la ofensiva de la derecha, gobierno de Maduro recibe amplio apoyo internacional
Alberto Acevedo
La participación de los electores el pasado domingo 30 julio, “ha sido un récord”, expresó al final de la tarde, el diputado a la Asamblea Nacional y primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV, Diosdado Cabello, tras hacer un primer balance de la jornada electoral del 30 de julio, en la que fueron elegidos los miembros de la Asamblea Nacional Constituyente convocada por el ejecutivo, para buscar una salida a la crisis que vive el país.
“Nuestro pueblo ha salido en una manifestación hermosa, (en una) demostración de amor. Los resultados así lo demuestran. 
El pueblo salió, a pesar de los intentos de hechos de violencia, convocados por la derecha de la oposición”, puntualizó el líder chavista.
Tras asegurar que la Constituyente va a comenzar a trabajar de una vez, en un plazo no mayor a 72 horas, Cabello dijo que “hoy el pueblo ha votado masivamente para blindar la Constitución, para que más nunca aparezcan grupos de personas que quieran violentarla. Vamos a una fase de contraofensiva”, aseguró el también expresidente de la Asamblea Nacional.
Una escuela popular
En cuando a las cifras de ciudadanos que acudieron a las urnas, el líder socialista, en un acto realizado en la sede del Comando Zamora 200, puntualizó que “tenemos que esperar a que se pronuncie el Consejo Nacional Electoral, pero les aseguro que hubo un récord de participación”.
Adelantándose a los planes de la oposición de derecha, Cabello dijo que la Constituyente “será una escuela de participación popular para el mundo” y que esta misma semana “comenzarán actos constituyentes, decretos constituyentes, y de estos actos se estarán esperando muchos, para que haya justicia y paz verdadera del país”.
Un primer resultado palpable de la jornada, es que ni el llamado de la derecha venezolana a incrementar la violencia, ni las amenazas de la Casa Blanca de endurecer las sanciones económicas contra el gobierno de Maduro, ni la condena ‘espuria’ de última hora de algunos mandatarios latinoamericanos, con Juan Manuel Santos a la cabeza, consiguieron amilanar al pueblo venezolano, que le dio el espaldarazo a la iniciativa de reforma constitucional.
En este sentido, como aseguró el analista político de ese país, Aram Aharonian, en la jornada del domingo el pueblo venezolano “votó por la Constituyente, pero también contra Trump y el intervencionismo”, el pueblo “salió a derrotar la violencia y el terror”.
Acoso a la población
Esta valoración es muy significativa, porque la oposición fascista intentó todo para detener la constituyente: quema de personas vivas, bloqueo de calles, amenazas a los vecinos que salieran a votar, llamamientos a la abstención, colocación de cadenas y candados a la salida de los conjuntos residenciales, entre otras medidas desesperadas. Horas antes de comenzar la jornada, en Ciudad Bolívar, al sureste del país, fue asesinado
José Félix Pineda, candidato a la Asamblea Nacional Constituyente.
En Altamira, elementos terroristas colocaron un explosivo, que estalló al paso de una caravana de la policía, dejando varios uniformados heridos. En distintos sitios del país, quemaron material electoral, incendiaron  puestos de votación. Por esta razón, las autoridades electorales habilitaron el Poliedro de Caracas como centro alterno de votación, y al final de la jornada se debió extender el horario casi dos horas, para permitir que un crecido número de votantes ejerciera su derecho al sufragio.
En las primeras horas de la mañana del lunes de esta semana, las autoridades informaron que la participación electoral fue del 47 por ciento, con más de ocho millones de votantes registrados. Habían sido convocados 19.477.387 sufragantes, en 14.500 centros de votación, con 24.000 mesas electorales. En estas condiciones, se eligieron 537 constituyentes así: 173 sectoriales (trabajadores, estudiantes, campesinos, etc.) y 346 territoriales: uno por municipio, dos por capital de departamento y siete por el Distrito Capital. El primero de agosto se elegirán ocho por los pueblos indígenas.
Solidaridad internacionalista
Respondiendo a las intenciones de Washington de aislar internacionalmente a la Revolución Bolivariana, el gobierno de Maduro recibió un amplio respaldo en las últimas horas. El presidente de Rusia, Vladimir Putin, advirtió el 23 de julio a su colega norteamericano, Donald Trump, que la desestabilización de Venezuela sería una amenaza, tanto para la democracia en ese país, como para toda Latinoamérica. “Advertimos con preocupación el aumento de las tendencias negativas y de la situación desestabilizadora en la Revolución Bolivariana de Venezuela, que está unida a Rusia por estrechos lazos de amistad y asociación estratégica”, consignó por su parte un comunicado de la Cancillería rusa.
En Mendoza, Argentina, una sesión de la Cumbre de los Pueblos del Mercosur produjo una declaración rechazando “enérgicamente las amenazas intervencionistas de Estados Unidos, que se evidencian en el comunicado de la Casa Blanca del 17 de julio contra la República Bolivariana de Venezuela, así como a todos aquellos gobiernos cómplices de la injerencia estadounidense”.
Ejemplo de empoderamiento popular
Por su parte, los países miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, ALBA, emitieron el 21 de julio una declaración condenando “las amenazas intervencionistas que ha recibido Venezuela por parte de Estados Unidos”. “Los países del ALBA rechazan a aquellos países que no solo ignoran el ordenamiento jurídico venezolano y el gobierno constitucional y legítimo del presidente Nicolás Maduro, sino también ponen en riesgo el estatus de América Latina y el Caribe como zona de paz alcanzada en la cumbre de la Celac en el año 2014”, dice el pronunciamiento.
Anteriormente, el Foro de Sao Paulo, en reunión celebrada en Managua el 19 de julio, en su declaración final consignó: “Los ataques principales del imperialismo y sus aliados en América Latina y el Caribe, son contra Venezuela y su Revolución Bolivariana, por sus valiosos recursos naturales y su importancia geopolítica y estratégica, de la que se desprende el criterio de que su derrota provocaría un efecto dominó en la izquierda latinoamericana gobernante”.
Muy significativo ha sido el lanzamiento, en Buenos Aires, la semana pasada, de la campaña “Venezuela, corazón de América”, que busca desarrollar acciones a nivel internacional contra el terrorismo y la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos del país latinoamericano. “La constituyente no solo es un freno a la violencia fascista y lacaya, sino que es un ejemplo de empoderamiento popular, una expresión del pleno ejercicio de poder de la gente que participa, discute y decide el rumbo del país”, asegura un pronunciamiento de este contingente latinoamericano de solidaridad con Venezuela.